Muy inteligentes, nobles, carismáticos, suelen ser demasiado alborotados, o muy tranquilos, son de temer cuando se enojan, pero si tienen para dar, lo harán, no dudarán ni un segundo. Lo único negativo que poseen, es su dualidad de signo mutable, por lo que sus cualidades, pueden llegar a ser defectos y hacer todo lo contrario de lo que se nombró anteriormente, de ese modo, es Sagitario.
A menudo, se lo ha relacionado siempre con un centauro en particular, Quirón, que se asemeja con las características positivas del signo. Las cualidades negativas, se le atribuyen en cambio por la especie en particular de esa criatura, el centauro, que era de una naturaleza ruda y agresiva, de un carácter de bárbaro.
El centauro Quirón, fue hijo de Cronos, que intentó seducir a Filira, pero ella, lo rechazaba y se convirtió en yegua para esconderse de él. Cuando el titán se enteró, y finalmente la encontró, se transformó en un corcel y la violó, concibiendo de esta manera al centauro, que obtuvo la forma de caballo por la transformación de sus padres, y la de un humano por la forma con la que solían mostrarse los dioses.
Sin duda, éste era distinto a los otros centauros, era amable, inteligente, hasta poseía conocimientos medicinales que Apolo y Artemisa le habían transmitido, además de las habilidades de caza. Quirón, fue maestro de muchos de los héroes mitológicos, entre ellos, Cástor y Pólux, Ulises (Odiseo), Aquiles, Teseo y Jasón.
Este fantástico centauro, tuvo su momento de dolor cuando Heracles le dio sin querer con una de sus flechas con veneno de la Hidra de Lerna, por lo que Quirón, vivió con un tiempo apegado a un gran padecimiento, ya que era inmortal y el tósigo le causaba dolor por el envenenamiento. Sin soportarlo, el centauro le entregó la inmortalidad a Prometeo y así, le puso fin a su vida. Zeus, lo subió a las estrellas por su nobleza y su honorabilidad en vida, convirtiéndolo en la constelación de Sagitario.